Panrallao - Sevilla, Sevilla

Irene S. R.

Servicio estupendo, nos atendieron super bien explicándonos todo. Una calidad y cuidado en los platos excepcional, buenas cantidades y el precio ajustado a lo que te vas a comer. Nos fuimos encantados y si estamos por la zona, para repetir.

Cristina B.

La comida esta rica, pero el tamaño es excesivamente pequeño para los precios de los platos. Por no hablar del precio de la cerveza… una copa mas bien pequeña, 2,5€. Las camareras son muy amables y dan muy buen servicio, pero la cocina es mas bien lenta.

María C.

Merece mucho la pena, todo muy rico.
Las papas es lo que menos nos gustó (dentro de que estaban ricas). LAS COSTILLAS DE ATÚN ESTABAN ESPECTACULARES.

Manal T. E. G.

Un descubrimiento maravilloso. Platos tradicionales reinventados pero que no pierden su esencia. Hemos probado la Gilda de boquerones, la ensaladilla de pollo y las costillas de atún y cada uno de estos platos estaba para rebañar con pan(que también estaba riquísimo). El trato al cliente es espectacular y el sitio es tranquilo y agradable. Recomendadisimo!!!

Álvaro R. T.

El servicio en general fue horrible. Reservamos una mesa dentro con semanas de antelación y el mismo día una hora antes nos avisaron que no había sitio y que nos podían poner fuera (habiendo previsión de lluvia)

A la hora de pedir faltaban muchísimas cosas, no solo de la carta si no cosas básicas como agua mineral o pan sin gluten. Aún así pedimos y en mitad de la comida se puso a llover, nos cambiaron a una mesa alta dentro pero nos dijeron que moviéramos nosotros todas las cosas.

Durante el servicio fallaron muchas cosas, la botella de vino que pedimos venía caliente, la carne que pedimos de 400g traía una cantidad super escasa (aunque hay que decir que la comida si está buena) y lo peor de todo, uno de los platos que habíamos pedido (Corvina) no llegaba y cuando preguntamos nos dijeron que no había (llevábamos una hora esperándolo), por lo que mi madre se quedó sin comer. Para colmo ese plato si venía en la cuenta cuando la trajeron.

Ante todas estas quejas los camareros (que es cierto que iban sobrecargados) no nos dieron ninguna solución e incluso se desentendieron de la situación. La encargada tampoco dio solución ni se disculpo por nada, se rió en nuestra cara y nos dijo que quitaba la Corvina que no habían servido como si fuera un favor.

Conclusion, una cuenta bastante alta (con 10€ de servicio incluido) para pasarlo mal el día de reyes a pesar de planearlo con semanas de antelación.

Cristina

Muy mal la verdad. Teníamos una reserva y nos estaba metiendo prisa la camarera para elegir (eran las 15:30) cuando se suponen que cierra el bar a las 17:00 , porque cerraban cocina. Por otro lado no tenían nada de lo que queríamos pedir y en vez de recomendar, malas caras. De hecho, ha sido poco amable con nosotros. Comida muy cara , la verdad: 2 cervezas , una bolsa de 4 trozos de pan y cuatro patatas con salsa han sido 13€. No volveremos a repetir

Cristina D.

Buena opción para almorzar o cenar en los alrededores de Nervión Plaza. La carta es bastante interesante y ofrece estupendas opciones para todos los gustos. Probamos el cachopo, las croquetas de cabrales, el risotto de calabaza (buenísimo), la pinsa de calabaza (fusión entre focaccia y pizza), el timbal de huevos y guanciale y la burrata con salmón marinado y fresas 🍓

Los postres estaban bien, aunque tampoco destacaría uno en concreto.

Éramos 5 comensales y pedimos 5 platos, 1 croquetas para compartir, bebidas y 2 postres. Salimos a 30€ por persona para almorzar.

Raquel P.

Fuimos un viernes de julio, así que estaba muy tranquilo. Las tapas y platos son elaborados. La tapa de ensaladilla con pollo y Ali Oli estaba buenísima. El precio es justo para la elaboración y materia prima, nos salió unos cincuenta euros dos platos, tapa y bebidas. Buen lugar para cuando apetezca probar nuevas mezclas de sabores.