Mesón Baño Frio - La Malahá, Granada

Joaquin P

Agradable restaurante tipo mesón/ventorro. Comida casera de calidad. Tiene una agradable terraza con zona de césped y además es pet-friendly.
La comida tardó en salir bastante pero todo estaba bueno: migas, arroz caldoso de bogavante (quizás nos esperábamos más de este plato) y codillo (bastante bueno).
Para terminar pedimos varios postres para probar. Buen restaurante!!

Soledad Manzanera

El Mesón tiene comida a la leña, es el lugar perfecto para disfrutar de una experiencia gastronómica inolvidable en familia. Ofrecen un ambiente cálido y acogedor, donde el aroma de la leña y el sabor de sus deliciosas preparaciones se combinan para crear momentos especiales.
El servicio es inmejorable, con un personal amable y atento dispuesto a asegurarse de que cada visita sea memorable. Cuentan con un amplio espacio para que los niños puedan jugar y divertirse mientras los adultos se relajan y disfrutan de una comida exquisita.
Ya sea para una celebración especial o una salida familiar, es el destino ideal para todos.

Miguel Ángel Valenzuela Maya

Buscábamos comer un buen arroz en un ambiente familiar y con sabor casero de toda la vida, y hemos dado en el clavo.

Hemos disfrutado la experiencia como hacía tiempo que no lo hacíamos. La comida está buenísima, todo casero. Pedimos una ensalada de queso de cabra, unos torreznos de Soria (para quitarse el sombrero, vaya cosa buena), un variado de barbacoa (chorizo, panceta y morcilla, todo buenísimo) y el plato estrella… un arroz de carne tremendamente bueno. Bien de cocción y perfecto de sabor, cantidad y con ese regustito a leña que lo hace sobresalir.

De postres hemos probado el pudding de almendras y la tarta de queso, ambos bien presentados y buenísimos. Todo casero.

El servicio ha sido sorprendentemente rápido (a pesar de haberles faltado un camarero), así que otra vez “chapó” por el curro que se han dado para atendernos a todos de tal forma que esa ausencia no se ha notado.

Y del establecimiento, decir que es agradable, rústico y cálido y se respira el ambiente familiar por todos sus rincones. Es fácil de encontrar y dispone de aparcamiento cercano.

100% recomendable, sin duda alguna. ¡Volveremos!

PD.: Comparto fotos de la ensalada, los torreznos y el arroz, que una imagen vale mas que mil palabras.

Rafa Perez

Primera vez que vamos. No nos defraudó Google. Comimos arroz con conejo, espectacular.
Codillo muy bueno.
Ensalada con queso de cabra, espectacular.

Volveremos

Gloria CP

Tenía ganas de probar este restaurante del que me habían hablado. No tiene pérdida y está cerca de Granada, antes de llegar al polígono industrial de Escuzar. El restaurante tiene una zona amplia para aparcar el coche. Entre otros platos nos pedimos un arroz con bogavante que me encantó porque tenía ese saborcillo a leña que le daba un toque especial. También probamos migas, codillo, morcilla y chorizo y varios postres. Todo genial.
Ismael el dueño muy simpático y atento en todo momento. Nos invitó a tomar un té moruno delicioso en el jardín del restaurante poniendo el broche final a un almuerzo entre amigos.

encarni lucena

Lo hemos descubierto por casualidad porque buscábamos un lugar de comida casera para celebrar el cumpleaños de mi suegra y ha sido todo un descubrimiento, tanto con la comida, como con el personal.
Trato muy agradable pero..... Nos venimos sin la receta de las alcachofas. Jajajajaja
Pedimos :
Ensalada cesar
Alcachofas premium
Solomillo a la brasa
Huevos rotos con sobrasada
Lagarto a la brasa
Chuletillas de cordero

Ester Dabán Guzmán

Comida totalmente casera. Importante el buen trato de la ternera en las ascuas. Atención al público muy bien.
Importante que en un restaurante de comida casera las patatas no sean congeladas o precocinadas. Un acierto

Selene Sevilla Urbano

Llega el invierno y no hay nada mejor como ir a Mesón Baño Frío con sus salones tan bien aclimatados y disfrutar de sus comidas hechas a la leña. De primero pedimos ensalada con queso de cabra deliciosa y de segundo un espectacular chuletón de vaca madurada. Finalizamos con su tradicional té de menta y una tarta de queso, mi postre favorito. Cabe destacar la amabilidad y profesionalidad de sus anfitriones y camareros.