Chiringuito 4 latas - La Manga, Murcia

Patricia Marun

Hice reserva. Al llegar las mesas sucias y la nuestra no estaba apartada. Bueno, estamos de vacaciones...sin problema. El camarero agobiado, y solo 3 mesas ocupadas!!
Vasos y copas de plastic, en fin...Pedimos una ración de calamares a la andaluza y una de mejillones al vapor 12€ cada plato. Llegaron los calamares y, tras reclamar los mejillones llegaron unos 15 minutos más tarde. Y para finales eran solo 10 mejillones en la ración de 12€. Es broma? Pésima atención y malisomo servicio.
Y por no dejar de mencionar que la música rockera a todo volumen saliendo de un parlante de la barra.

Alberto GR

Chiringuito tranquilo en la manga. No masificado y buena comida. Buena relación calidad precio, hemos comido super bien. A destacar sardinas y pollo karagee. Un día de playa estupendo. Muchas gracias ☺️

Gema Or

Comimos en pleno agosto 8 personas. De entrante patatas 4 latas , unos boquerones uno mejillones al vapor y ensalada 4 latas. Los platos estaban bien cargados se comida. De segundo El arroz de marisco riquísimo.
El.personal es joven y muy agradables datos que nos gustó porque pensamos q hay q dar oportunidades a la juventud aunque se les nota poca experiencia. El próximo fin de semana repetimos.

Icue Ct

No entiendo cómo a estas alturas del verano pueden ser tan desastrosos. No tienen carta, está escrita en la libreta de las reservas con apenas surtido. A pesar de que no había mucha gente los platos tardaron muchísimo en servirse. La ensalada venía sin aliñar, el pan del día anterior, la paella tenía mala pinta y el aceite olía a reutilizado. En resumen, si encuentras sitio en otro lugar, no reserves aquí.

Juan Estrada

En primer lugar teníamos reservado para 12 personas y cuando llegamos había montada una mesa para 9. No hubo problema, ya que el chiringuito estaba vacía un domingo de Julio, ahí ya empezamos a arrepentirnos de donde nos estábamos metiendo.
Tras varios intentos para conseguir que nos trajera la carta nos dice que hay 10 platos disponibles de 50 que había en la carta.
Elegimos entre lo poco que había y lo primero en llegar fue el plato principal, el arroz y marisco. Poco a poco llegaban los entrantes, a cual peor de todos: los calamares rebozados parecía que estaban sin freír, el rebozado era harina blanca y crujiente, una nueva modalidad que desconocía. Las croquetas eran congeladas y no sabían a absolutamente nada. De postre, tras media hora esperando, llegaron las sardinas, que no estaban mal, lo mejor de esta experiencia gastronómica.
Por último, cuando llegó la cuenta, intentan cobrarnos 3 platos de sardinas, cuando habíamos pedido uno. Tras reclamarlo, vuelven con la cuenta, pero con 2 platos de sardinas. A la tercera fue la vencida, pudimos pagar lo que habíamos pedido e irnos de allí.
De camino al aseo, que hay para otro capítulo si queremos describirlo, el jefe estaba insultando al cocinero a voces, al menos había algo de espectáculo.

Una experiencia recomendable, si no te gusta comer bien y recibir un servicio pésimo.

Paula QUINTANA

Todo un descubrimiento. Lo primero mencionar a Ruth, nuestra camarera. Atenta, simpática y profesional a partes iguales. Pensó que no lo comeríamos todo pero, somos asturianos. Cada plato más delicioso que el anterior. Al lado del mar. Viendo el Cabo de Palos con su faro. Inmejorable. Comida exquisita de autor en un marco único. Ah, todo el personal es de diez. Volveremos sin duda.

Actualización 21/08/2022:
Hemos vuelto, como no podía ser de otra manera. Una vez más hemos disfrutado de comida de autor -hecha en condiciones del programa "Supervivientes"- que, además de estar exquisita, viene acompañada de un trato al cliente que es impecable -Izaskun y Fran, mil gracias, sois increíbles y unos profesionales de manual- y que te hace sentir como en casa. Las raciones son abundantes y sabrosas a tope. Haced caso al personal sobre la cantidad. Nos han dado unas Croquetas de queso de cabra y otra de jamón -ya dije, súper amables- sólo para probarlas y nos han invitado a los chupitos. Estás cenando. En un marco incomparable. Con un personal de diez que lucha y se esfuerza contra 28°C, la arena, la brisa, la humedad y; mientras aprecias que con todo eso en contra, los platos sean deliciosos y el personal para darles una medalla...aparece uno que debió de nacer entre viñedos de Borgoña y discute la temperatura del vino!! Además de tratar de muy malas formas a una chica que está trabajando y sacrificando su ocio por el tuyo. Discutir la temperatura de un vino que la marca una vinoteca En fin...lo dicho. Nacería debajo de una viña. Si pasas por La Manga, no dejes pasar la oportunidad de darte el gusto y vivir la experiencia Olokum. No te arrepentirás. Enhorabuena por el concepto, la lucha contra los elementos, la cocina sorprendente y un personal que se desvive por ti. Literalmente.

Jose Manuel Aguado

Fui a cenar con mi pareja y la velada en general estuvo bastante bien. El día acompañaba, ya que hacía algo de viento y no hacía calor. El chiringuito es súper bonito por la noche con un ambiente muy acogedor, no es el típico chiringuito. En cuanto a la comida, bastante contento, ya que son combinaciones que no encuentras en cualquier sitio, uno de los motivos por los que no doy las 5 estrellas es porque el secreto estaba demasiado duro y no se hacía cómodo comerse el sándwich.

El otro motivo por el que no doy las 5 estrellas, es porque a la camarera se le rompió el corcho del vino y nos sirvieron la botella llena de trocitos de corcho. Un fallo, ya que tu la botella la pagas igualmente.

El trato con el personal muy bueno y atentos.

Mi pareja es vegetariana y pudo comer perfectamente.

En general lo recomiendo y volveremos a ver si han pulido esos detalles.

Gustavo Adolfo Atero Lopez

La comida es espantosa... nunca he comido en un sitio tan malo.. el pulpo que era la recomendación de día estaba agrio, el rebozado de la fritura parecía yeso y unas simples patatas fritas por casi 8 euros que nos cobraron y tras media hora de espera con el restaurante casi vacío, las tuve que devolver porque sabían a pescado añejo y aceite radioactivo quemado. Después de llevárselas de vuelta ni si quiera se dignaron en ofrecer nada a cambio. Aún no entiendo como este restaurante sigue abierto