El Cuento Bar - Madrid, Madrid

Rodrigo Pérez

Aunque es un local muy famoso en Madrid, está bastante desactualizado. Lo primero que me llamó la atención fue la iluminación: tienen una luz constante de color morado, tipo ultravioleta, que no cambia en ningún momento. Básicamente, el sistema de luces es inexistente. A eso se suma que la música se escucha bastante baja, así que si esperas un ambiente tipo discoteca, este no es el mejor sitio.

El espacio tiene zonas muy oscuras, y con la luz ultravioleta fija, se hace un ambiente un poco raro. El local cuenta con dos barras, una en la planta baja y otra arriba, pero a partir de las 12 de la noche “se les acaba” la cerveza, esto obliga a comprar copas. No sé como se justifica esto, he visto alguna reseña que indica que al ser un bar de copas, los camareros justifican que no venden cerveza a partir de cierta hora, pero para mi carece de sentido.

Aunque sea tan famoso, desde mi punto de vista, falla en la música y la iluminación, si fuera un local nuevo no creo que viniese mucha gente… La decoración parece llevar ahí desde que abrieron, y tiene un aire anticuado (que igual a la gente le gusta). A su favor, eso sí, no está a reventar, algo que se agradece. A diferencia de otros locales donde casi no puedes respirar de tanta gente, aquí se toman en serio el tema del aforo. También tienen una máquina de tabaco por si quieres comprar.

La entrada cuesta 10 euros e incluye una copa, y si pides una copa adicional, te sale por 8 euros. No sé si volvería, hay sitios mejores con el mismo precio o mejor…

Aida Gómez Roldán

Una vergüenza de sitio, trato pésimo, los camareros de la terraza bordes , te dejan esperando por una mesa en la que sientan a otros que llegan más tarde sin reserva si quiera, por la cara dejando a los que estábamos antes esperando nuevamente, y luego evadiendo responsabilidades con el cliente y pasándose el marrón de unos a otros , encima de todo malos compañeros , por esta razón ni volveré ni lo recominedo.

Belén Hdez

Hemos pagado 12€ por una Coca Cola y 2 aguas…. Le sirvió a todo el mundo patatas y cacahuetes y a nosotras NADA. Debe ser que le sienta mal si no quieres emborracharte y entonces te tratan distinto

Ornella de iulio

Siempre que vamos, amables y atentos. Sitio muy divertido. Hay ambiente cualquier dia que vayas.

Luffy Uzumaki

Precios excesivos y desleales con el cliente. Un vaso de Bailey's 8 euros y un refresco 4 euros. Para esos precios y ese servicio te vas al Castizo de al lado. Como comentan otros, ha bajado mucho el nivel. Ya no es recomendable ir.

Marta Lara Fernandez

Ayer me paso uno de los episodios más surrealistas que he vivido en un bar. Serían las 20:30 cuando me pedí un agua con gas. El camarero con un tono bastante impertinente me dijo que no, que solo me servían o una cerveza o una copa. Ante mi asombro le dije que quería agua con gas e insistió diciéndome que cerveza o copa o que me fuese a otro sitio. Tonta de mi acabé pidiéndome una cerveza, pero que fuese sin gluten (ya que no lo tolero bien) pero me dijo que no tenían. Le dije que si la pedía normal me iba a sentar mal, pero le dio igual. En ese momento me tenía que haber ido, pero estaba con unas amigas y no quería fastidiar la tarde. Al final pedí la cerveza, aún que no tendría que haberlo hecho. Por supuesto no volveré a este sitio y espero que tomen medidas al respecto. Es la primera vez en mi vida que me obligan a elegir la consumición en un bar.

Juan F.A.

Eramos un grupo enorme y el servicio fue muy amable y detallista con nosotros, nos sentimos muy bien tratados. Las copas están a 7.5€, precio aceptable para la zona.

Rodrigo Castro casariego

Llegue al bar, pensaba que la cola de “fuera” era gente fumando porque no habia un orden preciso que me hiciera pensar que habia una cola, me puse en la puerta, llame a mi amigo y entramos. En un momento queriamos salir, y el guarda de seguridad me queria pegar porque me habia “colado” cuando era el mismo el que me habia abierto la puerta. Servicio malisimo, y un trato despreciable a alguien que solo queria pasar un buen momento con sus amigos. Si me dicen que hay una cola la espero, me parece completamente normal, pero cuando el guarda de seguridad le quiere pegar a un cliente por su error (por no saber hacer su trabajo tan simple como controlar la entrada), el problema viene del servicio no el cliente. No vuelvo, despreciables.